Cheryl Pepsii Riley - Let me be me (2006)
La carrera de Cheryl Riley, "Pepsii" para su círculo de amistades, se remonta al año 1988 con la publicación de su álbum debut "Me, myself & I" y su correspondiente single de presentación "Thanks for my child", todo un emblema para las madres afroamericanas que catapultó a Cheryl al número uno de la lista de ventas y que aún hoy mantiene cierta repercusión. A él le siguió "Chapters", con el que se involucra de nuevo en la temática social ya desarrollada en su primer disco y "All that" tras un cambio de compañía discográfica y una participación total en las tareas de composición y producción. A esta destacable carrera discográfica hemos de añadirle un creciente éxito en el terreno interpretativo. Cheryl ha participado en diferentes obras teatrales, musicales y proyectos cinematográficos de corte independiente, labrándose un nombre en la escena. No por ello olvida su faceta musical, manteniendo viva la llama mediante actuaciones en los más importantes "clubs" de New York con su banda, "DisFUNKtion".
2006 suponía el regreso al mercado discográfico de Cheryl Pepsii tras catorce años apartada de la industria. "Let me be me", el título elegido para esta nueva aventura, un elepé en el que una vez más se encarga de la composición, arreglos y arreglos vocales con la colaboración en esta ocasión de Luke Austin bajo la batuta de la producción. Asegura que ambos forman un equipo perfecto, un "matrimonio musical", como ella misma lo denomina.
El resultado salta a la vista, un álbum cargado de una fuerza interpretativa fuera de lo común, un desgarrador testimonio de vida y positivismo que tiene su base en el soul pero que incorpora detalles de diversos estilos como jazz, blues, gospel o funk en un intento por dotar a este trabajo de una sonoridad novedosa a la par que profunda. Como aliciente, la gran capacidad y el amplio registro vocal de Cheryl al servicio de una lírica excelente.
"Thanks" nos introduce de lleno a ritmo de gospel en un incesante viaje hacia los sentidos; con "Hold on" observamos la faceta más elegante del rythm&blues, que tendrá su secuela en temas como "Cool", "Not like every other woman" (que incluye un sampler del tema "I'm every woman" de Chaka Khan que en su día ya versionara Whitney Houston) o "Come over". "Inside" interioriza (valga la redundancia) ritmos cercanos al nu-jazz bajo base soul mientras que "Damn!" aporta cierta temática funk en un ejercicio de crudeza expresiva. Todo ello sobre un conjunto de fuertes reminiscencias gospel que tendrá su más clara expresión en el tema final, "Call on him".
Como contrapunto, por momentos la instrumentación se torna excesivamente plana y carente de desarrollo, si bien es cierto que estamos ante un proyecto de origen independiente cuyo coste de producción suele ser bastante limitado. No es, por tanto, un disco sobresaliente a nivel técnico pero sí una muy buena muestra de que puede llevarse a cabo un proyecto decente con paciencia y dedicación partiendo, por supuesto, de unas condiciones iniciales de talento que Cheryl Pepsii Riley supera con creces.